Post by lot on May 26, 2006 11:18:35 GMT -5
El planeta Tierra y el ser humano mantienen una relación madre e hijo, la cuál somos incapaces de asimilar debido a la gran inconciencia que atraviesa la humanidad, es por esto que dañamos los bosques y contaminamos las aguas, nosotros mismos somos la causa de la intoxicación en nuestra atmósfera. Muchos hombres han advertido y siguen advirtiendo el gravísimo peligro de no cambiar nuestros hábitos de manera que dejemos de malgastar en gran medida los recursos naturales que nos ofrece nuestra Madre.
Vivimos en un planeta gigante, cómo imaginar si quiera que los ríos, de dónde obtenemos el agua que nos mantiene vivos, se acabará, esto parecía imposible hace 50 años. Y ahora escuchamos que un país como Colombia, lleno de flora y fauna, tendrá que planear estrategias para no sufrir de sed en los próximos años. Nuestra Madre esta enferma, la contaminación de las ciudades es terrible, pero quien va a pensar que un pedazo de tierra con plantas es nuestra Madre. Recuerden hermanos que muchos se burlan de escuchar hablar de la PachaMama. Realmente la Tierrita es mucho más que tierra con plantas, ella es Vida, ella es alimento, abrigo, hogar, salud. Es increíble observar a la naturaleza con toda su diversidad de animales y plantas. No hay nada que se repita, ni siquiera las mismas plantas de la misma especie son exactamente iguales, siempre nos perdona de todos nuestras ofensas hacía ella, incluso siempre encuentra la manera de corregirnos a través de la propia experiencia.
Amar la Madre Tierra no significa vivir en el monte, o alejarse de las ciudades, amar la Madre Tierra es tener realmente la conciencia para verla con los ojos de la contemplación y entender sinceramente desde cada uno de nuestros corazones que es ella nuestra Bellísima Madre, si comprendemos esto, dejaremos de arrojar basuras a las calles, dejaremos de malgastar tantos recursos que podemos aprovechar para el bien de la humanidad. Ningún hijo debe irrespetar a su Madre.
Lastimosamente muchos de nosotros sólo aprendemos de golpes y caídas, y por eso sufrimos. Hermanos y hermanas, estas palabras todos las sabemos, pero tal ves haga falta que las recordemos y así podamos elevar nuestra conciencia, para obtener la sabiduría para sanar a PachaMama. Sanando la naturaleza nos estaremos sanando también todos nosotros, nuestras enfermedades enferman nuestra Madre, y las enfermedades de nuestra Madre nos enferman a todos.
Vivimos en un planeta gigante, cómo imaginar si quiera que los ríos, de dónde obtenemos el agua que nos mantiene vivos, se acabará, esto parecía imposible hace 50 años. Y ahora escuchamos que un país como Colombia, lleno de flora y fauna, tendrá que planear estrategias para no sufrir de sed en los próximos años. Nuestra Madre esta enferma, la contaminación de las ciudades es terrible, pero quien va a pensar que un pedazo de tierra con plantas es nuestra Madre. Recuerden hermanos que muchos se burlan de escuchar hablar de la PachaMama. Realmente la Tierrita es mucho más que tierra con plantas, ella es Vida, ella es alimento, abrigo, hogar, salud. Es increíble observar a la naturaleza con toda su diversidad de animales y plantas. No hay nada que se repita, ni siquiera las mismas plantas de la misma especie son exactamente iguales, siempre nos perdona de todos nuestras ofensas hacía ella, incluso siempre encuentra la manera de corregirnos a través de la propia experiencia.
Amar la Madre Tierra no significa vivir en el monte, o alejarse de las ciudades, amar la Madre Tierra es tener realmente la conciencia para verla con los ojos de la contemplación y entender sinceramente desde cada uno de nuestros corazones que es ella nuestra Bellísima Madre, si comprendemos esto, dejaremos de arrojar basuras a las calles, dejaremos de malgastar tantos recursos que podemos aprovechar para el bien de la humanidad. Ningún hijo debe irrespetar a su Madre.
Lastimosamente muchos de nosotros sólo aprendemos de golpes y caídas, y por eso sufrimos. Hermanos y hermanas, estas palabras todos las sabemos, pero tal ves haga falta que las recordemos y así podamos elevar nuestra conciencia, para obtener la sabiduría para sanar a PachaMama. Sanando la naturaleza nos estaremos sanando también todos nosotros, nuestras enfermedades enferman nuestra Madre, y las enfermedades de nuestra Madre nos enferman a todos.